El corcho es un magnífico regalo de la naturaleza, una obra maestra creada a partir de su propia ingeniería natural. Con ayuda de la tecnología, el corcho se ha adaptado para múltiples usos y se ha convertido, especialmente, en el tapón perfecto para los vinos de todo el mundo, desde aquellos de gran consumo hasta las cosechas más exclusivas.
En ACIn empleamos tecnología de punta, estrictos pliegos de condiciones y de control de calidad y medidas correctivas propias, con el apoyo siempre del componente humano que nos permite atender a las necesidades específicas de nuestros clientes y ofrecer la solución que mejor se adapte a cada uno de los retos que nos planteen.
Nuestros clientes entienden que la simbiosis entre tecnología y competencia humana es necesaria para sacar provecho del regalo natural que representa el corcho, logrando el equilibrio perfecto entre naturaleza y tecnología. Ofrecemos un amplio asesoramiento técnico y personalizado que es consciente de la importancia, cada vez mayor, de la diversificación de los mercados del vino y de las bebidas alcohólicas hacia nuevos sectores, cada uno con sus necesidades propias. Garantizamos soluciones de máxima confianza y eficiencia, manteniendo una estructura de costes altamente competitiva.